Es un tratamiento no invasivo que utiliza un espectro de luz de alta energía para tratar diferentes afecciones de la piel. A diferencia del láser, la IPL emite múltiples longitudes de onda, lo que la hace versátil y efectiva para distintos problemas cutáneos.
¿Para qué sirve?
• Tratar manchas pigmentadas como léntigos solares, melasma y queratosis seborreicas planas.
• Mejorar lesiones vasculares, incluyendo angiomas, telangiectasias y cuperosis.
• Reducir el fotodaño en zonas como cara, escote y manos.
• Estimular la producción de colágeno, mejorando la firmeza y textura de la piel.
Beneficios
• Versatilidad: trata múltiples imperfecciones en una sola sesión.
• No invasivo y con mínima recuperación.
• Resultados progresivos y naturales.
• Mejora la calidad de la piel a nivel global.